La apuesta por la eficiencia energética
El sector inmobiliario continúa con planes de crecimiento en Latinoamérica construyendo una infinidad de proyectos comerciales y residenciales. Apostar a la inversión de edificaciones verdes es cada vez más redituable sobre todo para el inversionista. Su eficiencia energética permite tener espacios más cómodos, prolonga el tiempo de vida del edificio y contribuye al medio ambiente.
El inversionista debe ver este método de construcción como un aliado que le rendirá frutos a largo plazo. Ya que la eficiencia energética incrementa el valor del inmueble para su venta o arrendamiento, superando a la edificación tradicional.
El uso de sistemas de fachadas, juega un papel importantísimo para conseguir un nivel de eficiencia superior.
Desde el inicio del proyecto, el inversionista debe involucrarse en el proceso de diseño para conseguir un mayor rendimiento energético (ahorro). Asimismo, es preciso conocer cómo éste beneficiará al usuario final para darlo a conocer a sus habitantes.
La aplicación de los sistemas de fachadas ventiladas aporta mejoras térmicas y acústicas. Son de gran inversión, por lo tanto, el inversionista espera que aporten excelentes beneficios a su nuevo proyecto. No obstante, se aplican auditorías a edificios con fachada ventilada para medir su efectividad. Éstos reflejan una considerable reducción en el uso de energía, gas y luz; así como la reducción en los gastos de mantenimiento.
¿Cómo funciona una doble fachada?
La radiación solar entra en contacto con la superficie de la edificación, reflejando una parte y absorbiendo el resto a través del material; éste se calienta e irradia energía. Para retirar el calor absorbido, el sistema de fachada aprovecha la corriente de ventilación convectiva que se genera en su cámara para disiparla. Asimismo, permite la circulación de aire que se introduce por la parte inferior de la fachada; ésta asciende por efecto chimenea disipando el calor y saliendo por la parte superior del edificio.
Realizar un edificio con eficiencia energética, nace a través de la necesidad de ofrecer mejores espacios, más habitables y confortables. Con la actual oferta de nuevas construcciones, este factor puede ser determinante para generar una diferencia competitiva.
También estudios demuestran que brindar confort al usuario, impacta positivamente en su desempeño. Considerando este dato, las empresas que buscan un nuevo espacio se pueden inclinar a favor de un edificio bioclimático.
En resumen, un sistema de fachada ventilada aporta:
- Mejoras en las condiciones acústicas y térmicas en el interior del edificio haciéndolo más confortable
- Ahorros en el consumo energético
- Reducción de costos de mantenimiento
- Mayor rentabilidad del inmueble
- Prolongar la vida útil del edificio
- Cubre las expectativas de vanguardia, calidad y diversidad